Se busca impulsar y fortalecer la comercialización de carne porcina y sus derivados

En el marco de esta estrategia, que sigue directivas emanadas desde el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, encabezado por Julián Domínguez, el vicepresidente del Senasa, Rodolfo Acerbi, recibió a las autoridades de la Cámara Argentina de la Industria de Chacinados y Afines (Caicha) que acaba de cumplir 80 años.
Acerbi y la comitiva de la entidad que agrupa a 83 empresas, integrada por Gustavo Lazzari, Luis Veralli, Ornella Giacosa y Martín Gyldenfeldt, intercambiaron visiones sobre la proyección productiva de la industria porcina destinada al mercado interno y para la exportación.
El vicepresidente del Senasa se refirió a los estándares sanitarios de las plantas industriales porcinas habilitadas por el Senasa, “ponderada por distintas auditorias de los países compradores, que garantizan la sanidad e inocuidad de los productos elaborados y que llegan a los consumidores de la Argentina y el mundo”.
El funcionario detalló las acciones que realiza el organismo para contribuir al desarrollo de la actividad y llamó a las autoridades de la Caicha a avanzar en la promoción del consumo de carne y productos derivados del cerdo, destacando sus ventajas nutricionales.
Industria
El año pasado el sector industrial porcino faenó 694.880 toneladas de carne de cerdo, de las cuales 30.121 toneladas fueron exportadas y el resto se volcó al mercado interno. Asimismo, la producción anual de chacinados alcanzó a 515.500 toneladas en 2021; con un promedio de consumo de 11 Kg por habitante.
Actualmente la industria del chacinado cuenta con 400 fábricas en el país - 275 con habilitación nacional, el resto de nivel provincial -; 172 mataderos - 89 con habilitación del Senasa y los demás provinciales o municipales- y emplea en forma directa a 20.700 trabajadores y en forma indirecta a unos 45.000.