Maquinaria agrícola: pese al boom de ventas ponen en duda altos márgenes de rentabilidad

Mientras transcurre una nueva edición de Agroactiva en Armstrong (Santa Fe), una de las muestras a campo más destacadas de la región centro del país, el agro vuelve a mostrar todo su potencial. Allí, la industria metalmecánica exhibió algunos datos que se pudieron corroborar en cada uno de los stands donde los fabricantes de maquinaria agrícola ofrecieron a productores y contratistas su portfolio de productos.

En este marco, la Cámara de Fabricantes de Maquinaria Agrícola (CAFMA) confirmó que las 1.200 fábricas que componen la entidad incorporaron a más de 11 mil nuevos trabajadores en los últimos dos años.

Eduardo Borri, titular de la entidad, destacó en diálogo con Ámbito que “al comparar datos del INDEC en cuanto a la venta de maquinarias, 2021 se ubicó un 10% por debajo de 2017 -que fue un gran año-, sin embargo al hacer un desagregado de la participación de la maquinaria de industria nacional, la cifra llegaba al 40%. Según los datos del año pasado esa tendencia se revirtió y pasó a ser exactamente al revés, es decir que creció fuertemente la participación de la fabricación nacional dentro del total. Otro dato que arroja el INDEC, es que al fin del primer cuatrimestre, medido en dólares estaríamos teniendo un 45% de incremento en facturación por lo tanto es altamente probable que 2022 supere a 2017”.

Cuando se analizan las causas por las cuales se logró un fuerte incremento en las ventas, varios fabricantes con los que Ámbito dialogó explicaron que el gobierno le dio un buen impulso al sector al ofrecer créditos a tasa negativa. Según Borri, “fue un cambio importante ya que en el gobierno anterior las tasas se ubicaron un 30% por encima de la inflación, con lo cual era muy malo para todos y era muy difícil cerrar operaciones”.

Lisandro Tron, CEO y fundador de Fertec y Grupo Nort, una de las empresas líderes en el mercado de fertilizadoras, detalló que en cuanto al crecimiento del sector “no hay una sola lectura” y agregó que “el campo es una actividad a la que le va bien y que necesita crecer e invertir. Justamente eso fue lo que eligió el productor para resguardarse frente a la inflación. Fue muy importante tener tasas negativas para concretar ventas y porque gracias a eso la industria incrementó su capacidad productiva”.

El boom de ventas que se comenzó en 2020 hizo más grande el negocio, sin embargo detrás de la foto del éxito hay algunos detalles que merecen ser tenidos en cuenta. Nelson Lambertini, presidente de Mainero, una empresa del rubro que desde 1933 produce maquinaria en Bell Ville, Córdoba, detalló a este medio que “los últimos 18 meses fueron muy buenos desde lo comercial pero muy difíciles desde lo industrial. Pasamos por muchos problemas, entre ellos el aprovisionamiento de insumos, las restricciones para la importación, la dificultad de conseguir mano de obra calificada. Eso hace que la parte industrial no pueda seguir el ritmo de la comercial”.

El empresario también destacó que “los precios de los granos fueron buenos, hubo mucho apoyo del sector financiero, con fuerte presencia de los bancos estatales que ofrecieron tasas subsidiadas y además la campaña no fue tan afectada por la sequía”.

Todos los industriales coinciden: fueron casi dos años muy buenos pero podrían haber sido mucho mejores si la parte industrial hubiera acompañado.

En cuanto a los créditos, vale recordar que el Banco Nación presentó en Agroactiva una línea especial de financiamiento a tasa subsidiada por un monto de $10 mil millones para productores de MiPymes y clientes de la entidad. El presidente del Banco Nación, Eduardo Hecker, explicó que la nueva línea de crédito está destinada a maquinaria agrícola de origen nacional, con un monto máximo de $15 millones. El financiamiento incorpora además una tasa del 27,75% con hasta 48 meses de plazo.

Una de las frases que sobrevoló cada una de las charlas con los empresarios fue que “aún con muchas ventas, es posible fundirse en este negocio”. Es que a la hora de fabricar una maquinaria, los problemas siguen presentes porque cuando un comprador paga su unidad, cada empresa debe poner en marcha una ingeniería comercial que se destaca por lo compleja. De hecho, casi todos los industriales consultados manifestaron no saber cual es la situación real de la empresa en términos de rentabilidad.

Gabriel Rizotti, Gerente Comercial de Maizco, aseguró en diálogo con Ámbito que a pesar del boom de ventas “no sabría decir si se gano mas plata, pero sí que el negocio se hizo más complejo. Todos crecemos en infraestructura, niveles de empleo, etc. Pero hay que tener cuidado con los crecimientos y ver que el mercado sea real”.

El presente es prometedor para la metalmecánica, pero toda la cadena agro industrial manifestó durante la muestra que es necesario que quien gobierne entienda que el negocio agrícola es el motor del país. La expectativa que muchos tienen es que a partir de ahora, con la capacidad industrial ampliada, se puedan empezar a buscar negocios en el exterior, pero para eso serán necesarias nuevas políticas donde el tipo de cambio será protagonista de la discusión.